Período Hispánico
Período Revolucionario
En mayo de 1810, debido a la invasión napoleónica a España, Buenos Aires convocó a un Cabildo Abierto para arbitrar medidas frente a la caducidad del gobierno del virrey e instrumentar la reversión de los derechos de soberanía al pueblo y, como consecuencia inmediata, la instalación de un nuevo gobierno.
Entre 1810 y 1816 se sucedieron diferentes formas institucionales, siendo inaugural la Primera Junta (órgano de tipo colegiado) regulado principalmente por dos documentos: el Reglamento del ´25 – sancionado por el Cabildo– y el Reglamento del ´28 emanado de la propia Junta. Interpretando el primero de ellos se incorporan los diputados del interior al órgano porteño, creándose así la Junta Grande, institución que a su vez instauró juntas provinciales y decretó la creación de un Triunvirato. Así, fue sancionado el Estatuto Provisional del Gobierno Superior de las Provincias Unidas del Río de la Plata y los decretos sobre la libertad de imprenta y la seguridad individual.
En 1812, correspondió al Segundo Triunvirato llevar adelante la convocatoria a una Asamblea Constituyente, conformada al año siguiente, que fue el primer congreso de nuestra historia que asume la representación de la soberanía de las Provincias Unidas del Río de la Plata.
Entre 1810 y 1816 se sucedieron diferentes formas institucionales, siendo inaugural la Primera Junta (órgano de tipo colegiado) regulado principalmente por dos documentos: el Reglamento del ´25 – sancionado por el Cabildo– y el Reglamento del ´28 emanado de la propia Junta. Interpretando el primero de ellos se incorporan los diputados del interior al órgano porteño, creándose así la Junta Grande, institución que a su vez instauró juntas provinciales y decretó la creación de un Triunvirato. Así, fue sancionado el Estatuto Provisional del Gobierno Superior de las Provincias Unidas del Río de la Plata y los decretos sobre la libertad de imprenta y la seguridad individual.
En 1812, correspondió al Segundo Triunvirato llevar adelante la convocatoria a una Asamblea Constituyente, conformada al año siguiente, que fue el primer congreso de nuestra historia que asume la representación de la soberanía de las Provincias Unidas del Río de la Plata.
Si bien la Asamblea del año XIII, como cuerpo representativo no cumple con su objetivo fundamental de dictar una constitución, desarrolla una vasta tarea legislativa en pro de las libertades individuales y constituye la apertura hacia nuevas formas institucionales.
Desde el punto de vista de la organización política, estableció un Poder Ejecutivo unipersonal, creando el cargo de Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Instituyó el 25 de Mayo como fecha patria, estableció el Escudo y el Himno y mandó acuñar moneda propia, acciones con las que demostraba su voluntad de formar un estado soberano.
Desde el punto de vista de la organización política, estableció un Poder Ejecutivo unipersonal, creando el cargo de Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Instituyó el 25 de Mayo como fecha patria, estableció el Escudo y el Himno y mandó acuñar moneda propia, acciones con las que demostraba su voluntad de formar un estado soberano.
Declaración de la Independencia
Finalmente en 1816, un Congreso General Constituyente reunido en Tucumán, declaró la independencia de las Provincias Unidas y dictó el Estatuto Provisional de 1816, el Reglamento Provisorio de 1817 y la Constitución de las Provincias Unidas de Sudamérica.
A raíz de la batalla de Cepeda en 1820, el Congreso General fue disuelto y el Cabildo de Buenos Aires reasumió el mando universal de esta ciudad y de su territorio provincial, a la vez que nombró un gobernador interino, lo cual implicó la extinción del gobierno nacional. A partir de entonces, las provincias, aún fuertemente autónomas, continuaron una estructura robustecida por una serie de pactos inter–provinciales (Tratado de Benegas y del Cuadrilátero).
En diciembre de 1826, un nuevo Congreso Constituyente sancionó una Constitución de la República Argentina, rechazada mayoritariamente por los desacuerdos respecto de su texto.
En 1831, se firmó el Pacto Federal entre Santa Fe, Buenos Aires y Entre Ríos, al cual luego adhirieron las demás provincias, por el que se reconocía la existencia de un estado organizado como república, conformado por las provincias agrupadas en una federación.
A raíz de la batalla de Cepeda en 1820, el Congreso General fue disuelto y el Cabildo de Buenos Aires reasumió el mando universal de esta ciudad y de su territorio provincial, a la vez que nombró un gobernador interino, lo cual implicó la extinción del gobierno nacional. A partir de entonces, las provincias, aún fuertemente autónomas, continuaron una estructura robustecida por una serie de pactos inter–provinciales (Tratado de Benegas y del Cuadrilátero).
En diciembre de 1826, un nuevo Congreso Constituyente sancionó una Constitución de la República Argentina, rechazada mayoritariamente por los desacuerdos respecto de su texto.
En 1831, se firmó el Pacto Federal entre Santa Fe, Buenos Aires y Entre Ríos, al cual luego adhirieron las demás provincias, por el que se reconocía la existencia de un estado organizado como república, conformado por las provincias agrupadas en una federación.
Período de la Organización Nacional
Luego de la batalla de Caseros, que implicó la caída de Juan Manuel de Rosas como gobernador de Buenos Aires, las Provincias de Santa Fe, Corrientes, Entre Ríos y Buenos Aires firman el Protocolo de Palermo. Posteriormente, el Acuerdo de San Nicolás, rubricado ante la presencia de la mayoría de los gobernadores provinciales, ratifica el carácter de ley fundamental del Pacto Federal. Se convoca entonces en 1852 a un Congreso General Constituyente, con el objeto de dictar una constitución para la Confederación. El texto, promulgado por Urquiza el 25 de mayo de 1853, fue jurado por la república el 9 de julio, con excepción de Buenos Aires, la que se sumaría a la Confederación en 1860, como consecuencia de la batalla de Cepeda y de la firma del Pacto de Unión de San José de Flores del año anterior. De inmediato fue reformada la Constitución, quedando consumada la unión del país. La reforma acentuó la forma federal de la república, a la vez que, en lo ideológico, mantuvo el esquema de la Carta Magna de 1853.
Nenhum comentário:
Postar um comentário